top of page

La danza como herramienta de bienestar: el poder del movimiento para pacientes oncológicos en Lugo

  • 4 abr
  • 2 Min. de lectura

En Lugo, la danza ha encontrado un nuevo espacio donde expresarse: los hospitales. Gracias a la iniciativa de Sandra Fernández Blanco, bailarina lucense y fundadora del proyecto Cuerpo en Acción, pacientes oncológicos tienen ahora la oportunidad de reconectar con su cuerpo y emociones a través del movimiento.



Más que arte, una vía para el bienestar


Sandra no solo baila, también crea puentes entre las personas y su propio cuerpo. Su visión nació tras una experiencia de cooperación en Uganda, donde entendió que la danza podía ser una herramienta valiosa para personas en situaciones vulnerables. Así nació Cuerpo en Acción, una asociación que hoy trabaja en hospitales de Lugo y Albacete, acercando el movimiento a jóvenes hospitalizados y personas con cáncer.

«Empecé a pensar cómo introducir la danza en los hospitales porque vi que era una necesidad», explica Sandra. Y no se trata de clases convencionales. Sus sesiones incluyen materiales como pelotas, cintas elásticas y música elegida incluso por los propios participantes. Se trata de moverse, compartir y disfrutar, sin exigencias ni juicios.

Sesión Danzaterapia, Marzo 2025, Lugo
Sesión Danzaterapia, Marzo 2025, Lugo

El impacto en pacientes oncológicos


El pasado viernes, Cuerpo en Acción ofreció una sesión abierta en Lugo, dentro del programa de Humanización en salud. Allí, pacientes con cáncer —algunos con movilidad reducida o cansancio físico— se reencontraron con su cuerpo desde otro lugar: el disfrute cotidiano.

«Una alumna con cáncer de mama no podía subir un brazo... pero encontró otra forma de moverse. Siempre hay maneras de participar», relata Sandra. Estas sesiones no solo trabajan el cuerpo, también potencian la escucha, la comunicación y la expresión emocional.


¿Por qué importa esto?


Diversos estudios avalan el efecto positivo de la danza en personas con enfermedades crónicas. Según investigaciones del National Cancer Institute y la American Dance Therapy Association, la danza puede:

  • Reducir la ansiedad, la fatiga y el estrés.

  • Mejorar la coordinación y la percepción corporal.

  • Reforzar la autoestima y la expresión personal.

  • Fomentar el apoyo emocional dentro del grupo.

Además, iniciativas como esta promueven una visión más cercana y humana de la atención sanitaria, donde el arte y la expresión tienen un papel importante.


Un proyecto con futuro


Sandra Fernández Blanco insiste: no quiere que esto sea algo puntual. «La clave es la continuidad. Si repetimos estas sesiones, les damos valor y los beneficios se multiplican». Por eso, su sueño es ampliar el alcance del programa, llevarlo a más centros y seguir demostrando que el movimiento puede cambiar la forma en que nos sentimos.

En Cuerpo en Acción, creemos que todos los cuerpos tienen algo que decir, sin importar la edad, la forma o el estado de salud. Porque moverse también es una forma de cuidarse.

 
 
 

Comentarios


Donar con PayPal
bottom of page